El periodismo político debe ser
contrapoder, no alianza con el poder. Es hacer visible lo que nos ocultan, privilegiar
dar voz a quienes no la tienen, desmontar lugares comunes, denunciar con
evidencias, sugerir cuando no las hay pero tenemos la convicción de que algo se
pudre, ampliar nuestra perspectiva localista, referirnos a las cosas por su
nombre y no con eufemismos.
Desde 2002 la mitad de mi tiempo
alimenta periodismo; eso me ha llevado a hacerlo en medios impresos, radio, TV
e internet; en la prensa escrita desde las columnas de opinión. Comencé en El
Peruano, escribiendo semanalmente entre 2002 y 2005, gracias a César Árias
Quincot, lo que me permitió explorar lo internacional y la política local. De
marzo a junio de 2006 escribí en La República gracias a la invitación de quien
era editor de política, Mario Munive, que me permitió esa ventana en plena
campaña electoral y segunda vuelta entre Alan y Ollanta 2011. Alan ganó, Mario
fue relevado de la responsabilidad, asumida por Federico de Cárdenas, quien
luego de tijeretear el último artículo que publiqué, me comunicó que ya no
requerían mis colaboraciones.
De marzo de 2009 a marzo de 2012
escribí cada semana un artículo para La Primera. Fui presentado por mi amigo
Raúl Wiener y durante ese tiempo coordine con Manuel Robles. Durante la campaña
del 2011 además escribí un artículo para el suplemento que aparecía los
viernes. Hasta que en marzo de 2012 se me informó que La Primera ya no
necesitaba de mis artículos por la prioridad que se le iba a dar a la
información local. De los casi doscientos artículos aparecidos, me motiva que
al menos unos treinta estuvieran dedicados a la salud.
En radio estuve todas las mañanas
desde noviembre de 2004 a diciembre de 2007 en Civilización en radio San Borja.
Ya frecuentaba la emisora cuando Guillermo Giacosa dejó de conducir el programa
que durante años abrió la programación; por una de esas circunstancias, terminé
frente al micrófono en ese horario por casi mil programas. El último día de
2007 se me informó la suspensión de Civilización http://www.larepublica.pe/02-12-2007/una-voz-para-despertar
La TV de señal abierta me ha
permitido conducir un equipo y estar en el día a día de la labor de prensa.
Constatación: manipular y desinformar desde la TV es simple; el periodista que
cae en esa tentación se pone precio. Estuve en RBC desde mayo de 2011 a junio
de 2012; primero con Yo Acuso http://www.youtube.com/watch?v=FzrlukCyitI,
programa que compró el espacio para hacer lo contrario a lo que todos los
medios hicieron en las elecciones 2011: Desnudar al fujimorismo. De julio a
diciembre de ese año fui panelista en Habla El Pueblo.
En enero de este año RBC me
propone asumir la dirección de prensa: el bloque de 8 a 11 pm, implementando un
noticiero y programa: Radicales Libres. Luego de explicarles lo que para mí
significa hacer prensa, RBC brindó todas las facilidades para sacar al aire
casi 100 jornadas de información y política. Hasta que, en el momento en que la
conflictividad social desbordaba en Espinar y Conga y nuestra posición era
radicalmente distinta a la de los otros canales http://www.youtube.com/watch?v=xIB-50us1mI RBC
nos comunicó que la dirección de prensa quedaba desactivada asumiéndola el
directorio y Radicales Libres era levantado del aire. Le dijimos a RBC que esas
no eran las condiciones en las que asumimos y nos retiramos. Yo fui convocado
para hacer prensa y la hicimos formando un equipo (foto de este artículo).
Ahora aportó en uno de los
intentos más frescos por renovar la lógica en que se hace prensa en el país.
Rolando Toledo invitó a Radicales Libres a La Mula TV http://lamula.pe/seccion/mulatv y
desde hace unos meses estamos en esta plataforma con libertad de temas y
enfoques. Antes participé en la experiencia de Perú Net TV, promovida por el
colectivo Otra Mirada, con micro programas cortos pero intensos http://www.youtube.com/watch?v=jYCqtYQQZU0&feature=relmfu
Pienso que hacer periodismo
político es hacer política; no utilizo el escudo que algunos periodistas usan para ponerse en otra vereda. Acá estamos
para incidir, influir, actuar en política. Que no la ejerzamos elegidos por el
electorado no impide que seamos piezas clave del sistema político; los
ministros tampoco son elegidos y la influencia de los grupos de poder es
evidente. Si de algo sirve insistir en hablar, escribir y comunicar, ojala sea
para fortalecer el sentido de la crítica al orden establecido: esa es la labor
de los que hacemos prensa.
Alexandro Saco - 1 10 2012
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