Una banda de asesinos opera bajo la administración municipal del distrito de San Borja. El video en el que ahorcan a un perro evidencia lo que puede haber sucedido a muchos otros animales desaparecidos en el distrito. La destitución y denuncia de los miembros del serenazgo identificados en el video y del jefe de seguridad de la Municipalidad de San Borja es lo único que cabe, de lo contrario el propio alcalde Alberto Tejada se convierte en encubridor de los actos. Estas actitudes no son ninguna novedad. Yo mismo, que vivo en San Borja, he tenido que intervenir hace un año y medio cuando un grupo de seis serenos golpeaba brutalmente a un chiquillo recolector de basura en la cuadra dos de la avenida Bulevar.
El asesinato del perro Gringo es la demostración máxima de una serie aberraciones que ocurren con los animales domésticos y con los no domésticos. Es una arbitrariedad que tiene consecuencias en la psicología de los perros, colocarles cadenas* al cuello o pecheras para pasearlos por calles o parques. El encadenamiento o atamiento incuba resentimiento que puede traer consecuencias como mordeduras sin provocación. Como afirmaba en un artículo anterior**, para observar la magnitud de la torpeza sólo se tiene que colocar una cadena o correa al cuello de un niño humano para ver las consecuencias; y cuando el niño entusiasmado por el verde del parque o por otros niños que juegan pretenda correr hacia ellos, usted tire de la correa, rasgue el cuello y traume a su hijo. A pesar de eso, millones de humanos en el mundo creen que se puede querer a un perro condenándolo a la esclavitud de la cadena.
Las administraciones gubernativas en todos sus niveles y en casi todo el mundo consideran que frente a los animales en general lo que cabe es la restricción y el encierro. Prohibiciones de ingreso a determinados lugares, exhibiciones en zoológicos*** o industrias sobre el cuidado animal o su alimentación, pretenden hacernos pensar que éstos están integrados a una sociedad moderna, cuando lo evidente es que esa sociedad los ha convertido en sujetos de nuestras peores distorsiones: limitación, exhibición, mercancía. Así, el asesino de perros está avalado por el antropocentrismo insaciable, ese que ha colocado al humano como centro de un orden que diariamente extingue especies y que ya causó daños irreversibles al planeta.
Lo que cabe frente a esa constatación de nuestra relación con los animales es reordenar. Establecer renovados ejes de relación con las demás especies. Optar entre el actual desarrollo y su consecuencia inseparable que es la extinción de la vida como la conocemos, o desmontar algunos de los fundamentos del desarrollo convertidos hoy en fundamentalismo desarrollista. El asesinato del perro sanborjino es repudiable; la destrucción del sistema de vida que la Tierra ofrece muestra al humano en su más influyente dimensión: la de un pusilánime**** frente a la riqueza del universo.
El humano ha trasladado sus categorías humanas restrictivas a su relación con las especies y con los recursos del planeta, y éstas son las que imperan en el orden político y económico. Ha dejado de lado trasladar las otras categorías que tienen que ver con las sensaciones. Así, un niño disfruta del juego y del aire libre, pero esa misma sociedad mantiene a un perro encadenado o arrinconado en una azotea, a un loro enjaulado o a unos peces en medio metro cúbico de agua. Esa fracción de estos hechos nos coloca frente al germen de una autodestrucción: la convivencia social no puede seguir siendo vista como una relación entre humanos para humanos; ésta implica la relación del humano con todo lo que lo rodea.
Si bien hay un aspecto legal en el que el humano castiga los daños entre humanos, el derecho aún no se involucra en la creación de una jurisdicción que se le relacione sustancialmente con el eco sistema y con las otras especies. Quizá sea pedirle mucho al derecho y a los sistemas judiciales conociendo sus limitaciones de origen. En todo caso lo que se abre frente a las limitaciones es la posibilidad de construir el pensamiento de convivencia integral en el que los problemas humanos a pesar de ser importantes, den paso a los problemas del planeta, que son los verdaderamente importantes; porque sin planeta no hay guerritas ni comercio ni olimpiadas.
* A no ser que se trate de perros expresamente criados o logrados genéticamente para la pelea. En todo caso se debería establecer la prohibición de esa manipulación.
** http://civilizacionperu.blogspot.com/2007/10/ahorca-tu-hijo.html
*** Existe un interesante debate sobre la necesidad de contar o no con zoológicos las sociedades. Es necesario diferencias zoológicos de centros de conservación animal.
**** DRAE: 1. adj. Falto de ánimo y valor para tolerar las desgracias o para intentar cosas grandes.
El asesinato del perro Gringo es la demostración máxima de una serie aberraciones que ocurren con los animales domésticos y con los no domésticos. Es una arbitrariedad que tiene consecuencias en la psicología de los perros, colocarles cadenas* al cuello o pecheras para pasearlos por calles o parques. El encadenamiento o atamiento incuba resentimiento que puede traer consecuencias como mordeduras sin provocación. Como afirmaba en un artículo anterior**, para observar la magnitud de la torpeza sólo se tiene que colocar una cadena o correa al cuello de un niño humano para ver las consecuencias; y cuando el niño entusiasmado por el verde del parque o por otros niños que juegan pretenda correr hacia ellos, usted tire de la correa, rasgue el cuello y traume a su hijo. A pesar de eso, millones de humanos en el mundo creen que se puede querer a un perro condenándolo a la esclavitud de la cadena.
Las administraciones gubernativas en todos sus niveles y en casi todo el mundo consideran que frente a los animales en general lo que cabe es la restricción y el encierro. Prohibiciones de ingreso a determinados lugares, exhibiciones en zoológicos*** o industrias sobre el cuidado animal o su alimentación, pretenden hacernos pensar que éstos están integrados a una sociedad moderna, cuando lo evidente es que esa sociedad los ha convertido en sujetos de nuestras peores distorsiones: limitación, exhibición, mercancía. Así, el asesino de perros está avalado por el antropocentrismo insaciable, ese que ha colocado al humano como centro de un orden que diariamente extingue especies y que ya causó daños irreversibles al planeta.
Lo que cabe frente a esa constatación de nuestra relación con los animales es reordenar. Establecer renovados ejes de relación con las demás especies. Optar entre el actual desarrollo y su consecuencia inseparable que es la extinción de la vida como la conocemos, o desmontar algunos de los fundamentos del desarrollo convertidos hoy en fundamentalismo desarrollista. El asesinato del perro sanborjino es repudiable; la destrucción del sistema de vida que la Tierra ofrece muestra al humano en su más influyente dimensión: la de un pusilánime**** frente a la riqueza del universo.
El humano ha trasladado sus categorías humanas restrictivas a su relación con las especies y con los recursos del planeta, y éstas son las que imperan en el orden político y económico. Ha dejado de lado trasladar las otras categorías que tienen que ver con las sensaciones. Así, un niño disfruta del juego y del aire libre, pero esa misma sociedad mantiene a un perro encadenado o arrinconado en una azotea, a un loro enjaulado o a unos peces en medio metro cúbico de agua. Esa fracción de estos hechos nos coloca frente al germen de una autodestrucción: la convivencia social no puede seguir siendo vista como una relación entre humanos para humanos; ésta implica la relación del humano con todo lo que lo rodea.
Si bien hay un aspecto legal en el que el humano castiga los daños entre humanos, el derecho aún no se involucra en la creación de una jurisdicción que se le relacione sustancialmente con el eco sistema y con las otras especies. Quizá sea pedirle mucho al derecho y a los sistemas judiciales conociendo sus limitaciones de origen. En todo caso lo que se abre frente a las limitaciones es la posibilidad de construir el pensamiento de convivencia integral en el que los problemas humanos a pesar de ser importantes, den paso a los problemas del planeta, que son los verdaderamente importantes; porque sin planeta no hay guerritas ni comercio ni olimpiadas.
* A no ser que se trate de perros expresamente criados o logrados genéticamente para la pelea. En todo caso se debería establecer la prohibición de esa manipulación.
** http://civilizacionperu.blogspot.com/2007/10/ahorca-tu-hijo.html
*** Existe un interesante debate sobre la necesidad de contar o no con zoológicos las sociedades. Es necesario diferencias zoológicos de centros de conservación animal.
**** DRAE: 1. adj. Falto de ánimo y valor para tolerar las desgracias o para intentar cosas grandes.
Alexandro Saco
3 2 2008
3 2 2008
3 comentarios:
Estoy de acuerdo con que la convivencia social no puede seguir siendo vista como una relación entre humanos para humanos; pero lamentablemente desde siglos nunca respetamos a los demas seres vivos ni al propio espacio en el que vivimos, logrando asi una involución atodestructiva y generando en el hombre la insensibilidad y la crueldad .
En el caso del perro asesinado en San Borja, la culpa la tendrian las autoridades por contratar agentes de seguridad que no tienen ni educacion ni mocion ni nocion del respeto a los demas , delincuentes que merecen la peor sancion por actos tan primitivos y deprorables.
Un abrazo solidario.
Gonzalo Rizo-Patron
logoncho@yahoo.es
EL ASESINATO CRUEL Y ATROZ DEL PERRO GRINGO EN LA MUNICIPAIDAD DE SAN BORJA FUE ORDENADO POR EL TENIENTE ALCALDE CRL EP (R) MARCO ANTONIO ALVAREZ Y POR EL ALCALDE ALBERTO TEJADA NORIEGA SEGUN HA CONFESADO EL MISMO SERENO EJECUTOR CARLOS EDUARDO CHABRIA LEVANO POR LO QUE SE HA DETERMINADO QUE HAN SIDO ASESINADO Y TORTURADOS EN ESA MUNICIPALIDAD MAS DE 2000 PERROS Y GATOS EN LOS DOS PERIODOS DE LA GESTION TEJADISTA Y ALVARISTA. AHORA LOS DUEÑOS CUYAS MASCOTAS DESAPARECIAN DE SU CASAS SABEN QUE FINAL TRAGICO TUVIERON ESOS POBRES ANIMALES. EL 26 JUZGADO PENAL LES HA ABIERTO INSTRUCCION POR EL DELITO DE ABUSO DE AUTORIDADAD A ESTOS CRIMINALES Y TODOS ESPERAMOS QUE HAYA UNA SANCION EJEMPLARIZADORA.
JULIO ROCHERBRUM
Me parece el articulo del señor Rochabrum que esa justo ya que es sabido que las autoridades municipales de San Borja son unos corruptos e inmorales ademas de asesinos lo que pasa es que los vewcinos les tienen terror ya que pueden tomar represaalias contra ellos como lo vienen haciendo con el amo del perro Gringo el sñor Angel Ruiz quien vive una tragewdia y a salto de mata segun me he enterado, pero los vecinos lo apoyamos y nos solidarizamos con el pues tien los pantalones para enfrentarse a esa mafia de Tejada. Siga avanti Srt. Ruiz que nosotros estamos al tanto de su caso y seguiremos apoyandolo.
Hno. Peter
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